La impresión 3D es una tecnología de creación cada vez más solicitada por las empresas. Es una solución rápida, menos costosa y una auténtica inversión, tanto para la fabricación de un prototipo como para la creación de objetos en serie. Además, este mercado no tiene límites en cuanto a la forma y las dimensiones que se pueden producir. Como el precio de una impresión es el elemento principal en la celebración de un contrato de fabricación, aquí tienes más detalles sobre el tema.
¿Para quién es la impresión 3D?
La impresión 3d se dirige a todas las empresas, independientemente de su sector de actividad: industria, construcción, comercio, energía, servicios, turismo, finanzas, etc. Para algunos, los modelos 3D son la base de su negocio. Es el caso, por ejemplo, de las industrias que crean objetos, las marcas que utilizan envases para sus productos, los diseñadores de todo tipo (diseñadores de muebles, de utensilios de cocina, etc.). Para otros, el uso de estas impresoras es ocasional: creación de logotipos, rótulos, PLV, trofeos, etc. La función de una impresora 3D resuelve muchos obstáculos para la mayoría de los jugadores.
¿Qué criterios determinan el coste de una impresión 3D?
- El archivo del modelo: con un archivo que se pueda utilizar para imprimir, no tendrá ningún coste adicional. De lo contrario, tendrá que crear el archivo con un software específico. Esto afectará al coste.
- La fase de impresión: el tamaño del objeto y el número de piezas a imprimir determinarán el consumo de materiales. Por no hablar de la naturaleza y la calidad de los materiales, cuyos precios varían mucho.
- Acabado o tratamiento posterior: estas opciones son determinantes en el presupuesto. Una pieza impresa que se entregue en bruto será más barata que otra que necesite alisado, etiquetado, coloreado y barnizado. El acabado de una pieza con o sin resina define, entre otras cosas, la calidad final del trabajo realizado.
El precio de una impresión 3d también puede variar en función del contexto, el tiempo de producción y el volumen:
- Con un proveedor de servicios profesional, el presupuesto depende de los tres criterios mencionados. También hay que tener en cuenta la calidad de las impresoras y la calidad del material.
- Para los particulares que deseen imprimir en casa, el coste será diferente, incluida la adquisición de equipos que, por lo general, serán más pequeños que los utilizados por un profesional. También hay que comprar materias primas. Por no hablar del tiempo que hay que dedicarle si hay que crear varias piezas pequeñas para hacer un formato grande porque la máquina es demasiado pequeña. Y también el tiempo de creación del archivo en un programa informático.
- La calidad de la materia prima también es importante. El precio de una bobina de 1Kg de filamento PLA en el mercado varía de 15 euros a más de 60 euros según la marca y las especificidades de la impresora. El PLA Pro1 ronda los 60 euros de media, mientras que el coste de ciertos filamentos puede superar los 100 euros por kilogramo.
¿Por qué optar por la impresión 3D en Pami3D?
- La calidad de la impresora: las máquinas utilizadas son profesionales y, por tanto, permiten crear objetos de calidad, a diferencia de una impresora de consumo.
- La calidad de los materiales: utilizamos materiales de calidad ya sea para una línea de producción de gran, mediano o pequeño formato.
- La calidad del acabado: lo que más cuenta es el rendimiento de la pieza final. El aspecto del acabado superficial y el color son idénticos a los requeridos.
- El proceso de fabricación y ejecución: cada proyecto pasa por varias etapas, empezando por la creación del archivo 3d o escaneado, pasando por la impresión, la limpieza de las piezas, el acabado visual, el montaje de las piezas, la pintura y los efectos.
Todo lo que necesita saber para elegir su proveedor de servicios de impresión 3D
¿Cómo elegir la materia prima?
La elección del material depende del objeto que se vaya a imprimir, de las impresoras y de los sistemas de impresión, como sls, fdm y sla.
PLA para la fabricación de objetos para colocar en su interior y su coste es asequible en comparación con los demás.
PLA Pro1 que también es plástico pero más resistente y adecuado para objetos de exterior. PETG, que tiene la particularidad de deformarse sin romperse y es resistente a los productos químicos.
TPU para piezas flexibles y, por último, ABS. Los metales también se utilizan para la fabricación aditiva mediante impresoras de tipo DMLS: metal en polvo, acero inoxidable, titanio, aluminio, hierro, oro, platino, etc.
